Mila Markova

Háblanos un poco de ti y de tu trabajo.
Mi nombre es Mila Markova. Trabajo como psicóloga en la Unidad de Cardiología Pediátrica del Hospital Nacional del Corazón en Sofía, el único centro hospitalario que realiza cirugía cardiaca a niños en Bulgaria y Macedonia. También soy miembro de “Child’s Heart”, la asociación búlgara creada para mejorar la calidad de vida de niños y jóvenes con cardiopatías congénitas y de sus familias.    

¿En qué consiste tu trabajo?

Mi función principal es preparar a los niños y a las familias para las cirugías cardiacas. Esto significa que hablo con los padres antes de que sus hijos ingresen en el hospital y me aseguro de que entiendan todo sobre el proceso. Después de la operación, también hablo con ellos para que reconsideren sus experiencias. Normalmente atiendo, al mismo tiempo, a unos 10-15 niños y a sus familias, dependiendo del número de niños que están siendo tratados en el departamento.   

¿Por qué te convertiste en una psicóloga de niños con cardiopatías? ¿Cuál fue tu motivación?

Siempre me ha interesado la psicología infantil. Cuando estaba estudiando psicología, una parte de mi formación práctica la realicé trabajando con niños. Además, tengo un amigo con una enfermedad crónica del corazón, por ello cada vez me involucré más y más con las cardiopatías congénitas. Cuando empecé a trabajar en el hospital, me di cuenta de que la familia era extremadamente importante para los niños enfermos. En Bulgaria, las familias son muy numerosas y tienden a sobreproteger a los niños. Ése es uno de los retos de mi trabajo. Tengo que hablar con todos los miembros de la familia, si no, no podré ayudar al niño.   

¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo?

Disfruto trabajando con tantas personas distintas de diferentes culturas. Nunca sabes a quién vas a encontrarte la próxima vez, qué origen cultural tiene. Muchos de nuestros pacientes vienen de Bulgaria, pero también tenemos pacientes macedonios, albaneses y árabes. También hay una minoría turca en Bulgaria. Así que nunca sabes qué va a pasar, qué religión o estructura familiar vas a encontrarte.

Muchos de nuestros pacientes son romaníes. En las familias romaníes, las abuelas son muy importantes. Así que es necesario involucrarlas. Tratamos de explicar a las familias que sus hijos necesitan saber qué es lo que está pasando y qué va a pasar durante una operación. Las familias turcas, en particular, son muy, muy protectoras con sus niños, quieren protegerles de todo lo que les pueda asustar. Algunos preferirían no tener que contar nada a sus hijos sobre la operación. Así que les tengo que explicar que el hecho de no contar estas cosas a sus hijos puede reducir la confianza de los niños. Porque, cuando un niño se despierta en la unidad de cuidados intensivos y se da cuenta de que le han operado, se siente sorprendido, asustado y traicionado.     

¿Dónde crees que existe una necesidad de mejora en tu área de trabajo?
En primer lugar, en el sistema nacional de salud. Los seguros de salud eran públicos en Bulgaria, pero ahora tenemos una compañía de seguros privada. Todo el mundo paga sus primas a esta compañía y la compañía tiene un acuerdo con el gobierno. Todo el cuidado sanitario es pagado por la compañía de seguros y el gobierno. Esto significa que el gobierno puede dictar precios. Déjame darte un ejemplo: una operación puede costar 25.000 euros, pero el gobierno decide que sólo pagará 15.000 euros y que es suficiente. Pero, en realidad, no es suficiente, con lo que el hospital tiene que luchar con estos presupuestos limitados.    

¿Cómo puede Corience ayudarte en tu trabajo? ¿Qué esperas de esta plataforma?

Espero que Corience pueda crecer y convertirse en una fuente importante de información en Internet con rica información sobre cardiopatías congénitas. ¡La información es tan importante! Muchos padres me cuentan que lo primero que hicieron, cuando conocieron la dolencia de su hijo, fue hacer una búsqueda de información en la red. Corience es una herramienta perfecta para ofrecer esta información de una manera accesible –si entienden la lengua-. Por ello espero que, un día, haya una versión búlgara.  

¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre?

Me gusta nadar y bailar. Dos veces a la semana, tengo clases de baile latino y danza folclórica búlgara.