La confianza lo es todo!

Gerti G. / photocase.com

Un niño de cada cien viene al mundo con algún defecto cardíaco congénito. A pesar de las limitaciones físicas y los problemas de salud derivados, la mayoría consigue una buena calidad de vida. Las niñas y los niños lo asocian, además de a los avances médicos, a la confianza adquirida en la infancia y la juventud con respecto a las propias capacidades para enfrentarse a las circunstancias de la vida. Los niños y jóvenes que padecen un defecto cardíaco congénito y que pueden desarrollar tal confianza en ellos mismos y en su entorno se sienten más a gusto que aquellos que carecen de ella.

La confianza en uno mismo mejora la calidad de vida de la persona

"La base de una buena calidad de vida es un fuerte sentido de coherencia", comenta el Dr. Bruno Neuner del Instituto de Epidemiología y Medicina Social de la Universidad de Münster. El sentido de coherencia es una confianza en la propia persona y en sus capacidades para hacer frente a las circunstancias de la vida que se desarrolla durante los primeros años de vida. "Contar con un sentido de coherencia fuerte es un requisito previo para una buena salud física y psíquica. Ayuda a los niños a convivir con su enfermedad." Esto es algo que han demostrado el Dr. Neuner y su equipo, con el apoyo del Ministerio de Educación e Investigación de Alemania en el marco de un estudio de la Red de Competencias para el Defecto Cardíaco Congénito.

El deporte como fuente del bienestar

En el Estudio CoalaH (Coherence and Quality of Life in Adolescents with Congenital Heart Defects) los científicos valoraron datos de 770 jóvenes que padecían un defecto cardíaco congénito con edades comprendidas entre los 14 y los 17 años.

El resultado del estudio revela que, independientemente de la influencia médica y social, a las niñas, niños y jóvenes con un mayor sentido de coherencia les va mejor que a aquellas personas que tienen un menor sentido de coherencia. El deporte se perfila como un elemento especialmente positivo para el desarrollo de un sentido de coherencia fuerte. Esto lo demuestra el hecho de que el mayor sentido de coherencia lo presentaban participantes que practicaban deporte entre una y cinco veces por semana. "Está claro que el deporte debe practicarse en el marco de sus capacidades y de acuerdo con el médico", aclara el Dr. Neuner.

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Autor(es): Dr. Caroline Steingen
Revisado por: PD Dr. Bruno Neuner
Última actualización: 2012-02-10